Aquí en “El Cinco a las Cinco”
Este círculo de artistas no es mi habitual foro
y, aunque la responsabilidad me reprima
intentaré mantener vuestra atención con decoro
y, con mis palabras escritas , ganar vuestra estima.
Quizá haya sido un ingenuo e insensato
poniendo de manifiesto aquí mi presencia
para leer este sencillo y humilde relato
ante semejante y entendida audiencia.
No es la insensatez mi habitual proceder
pero no pude sentirme indiferente
ante la solicitud reiterada de mi paciente
y aquí me encuentro sin saber qué hacer,
Ante un público adicto al poema
no dejo de pensar en “si lo sé no vengo”
y es para mí un verdadero dilema
cómo superar el aturdimiento que tengo.
El miedo escénico me acongoja el alma,
me tiembla la voz y me siento estremecer
pues tengo un grave problema, que no sé leer
en público y ante el gentío sin perder la calma.
Me siento atrapado, sin otra escapatoria
que mi simple y pobre oratoria
por culpa de una jugada bien tramada y pilla
de ese hombre con barba, sí, de Manolo Casillas.
Ahora os pido atención durante un rato
mientras procuro leeros mi pequeño relato
y prometo hacerlo con el máximo esmero
para haceros llegar la historia de “Mi barbero”
José Miramón |